La primera vez que Nicole Simone vio a Stevie le rompió el corazón. Un perro joven chocando contra las paredes y dando vueltas fue suficiente para que ella decidiera que tenía que ayudarlo, a pesar de estar en otro país. La vida para Stevie un perro de 2 años nunca ha sido fácil. Los oficiales de control de animales encontraron a Stevie vagando por las calles del sur de Texas, cerca de la frontera con México, y lo colocaron en una jaula atestada, sin darse cuenta de que el perrito era diferente de los otros perros callejeros. Era sordo y parcialmente ciego debido a un defecto genético conocido como microftalmía, el perro fue atacado por sus  nuevos compañeros que lo dejó con una pierna herida.

Una fundación de rescate con sede en Austin, sacó a Stevie del refugio antes de que pudiera hacerse más daño. Sin embargo, las necesidades especiales del perro hicieron difícil encontrar el hogar de acogida adecuado. Simone, fundadora de Redemption Paws, un centro de rescate para perros en riesgo en Toronto, en Ontario, Canadá, esperaba poder darle a Stevie la oportunidad de encontrar una familia. Conocer a Stevie en persona solo confirmó los sentimientos positivos que había tenido sobre el perro sin hogar.

«Es muy dulce y gentil, a pesar de  no ver», dijo Simone a The Dodo. Él confía en los humanos completamente a pesar de todo por lo que ha pasado”. Una evaluación del veterinario reveló que Stevie sufría de una infección dolorosa en los ojos, que requería la extracción de ambos ojos, y el cachorro también dio positivo para la lombriz del corazón. Pero a lo largo de todo su tratamiento, demostró ser amoroso y rápido para adaptarse a las nuevas situaciones.

«Stevie se adapta rápidamente», dijo Simone. “Le gusta estar cerca de otras personas y perros. Nos comunicamos a través del tacto, [y] es genial».

Una vez que los problemas médicos se resolvieran, lo colocaron en un hogar de acogida en mayo donde finalmente podría orientarse. Pero encontrar una familia dispuesta a comprometerse con el cuidado su vida ha sido mucho más difícil de lo previsto. Simone enfatiza que muchos de los posibles adoptadores lo ven como una «novedad o algo por compasión».

“Stevie necesita empatía y estructura. «Sentirse mal por él y no darle límites no solo hace que sea difícil para los adoptantes, sino que también dificulta que Stevie se adapte a los nuevos entornos», agregó Simone.